Halo 5 vuelve a sonar, a 50 días para que empiece el E3 2014. Lo hace con una característica bastante comentada de Xbox One, pero que hasta ahora no hemos visto que sea un elemento muy diferenciador a favor de Microsoft, la nube.
Hasta ahora, hemos visto tres formas destacables de usar la computación distribuida en Xbox One. Por un lado, están los servidores que hacen la función de almacenaje. Estos nos permiten tener siempre nuestras partidas disponibles, tanto si falla el disco duro local como si cargamos nuestro perfil en otra consola. También tenemos el ejemplo de Titanfall, que permite encontrar servidor para nuestras partidas, siempre, gracias a que estos están distribuidos por todo el mundo y no dependen del poder económico de cada desarrollador. El tercer gran uso para la nube de Xbox One es el cálculo remoto, el análisis de datos, que hemos visto con Forza Motorsport 5 y su drivatar. En este, nuestro comportamiento se graba automáticamente, es analizado por el software que está en la nube y luego nos podemos enfrentar a una inteligencia artificial que se basa en partidas de millones de jugadores diferentes.
De momento, junto a la distribución de vídeo, las charlas online y algunas otras opciones más comunes, es lo que nos da la nube de Xbox One. Pero de aquí a finales de año veremos su evolución, con Halo 5 como ejemplo de una tecnología que lleva más de una década en desarrollo.
Todo comenzó con Halo 2, cuando Bungie aún formaba parte de Microsoft Game Studios y Ed Fries pensaba en Xbox 360. Por aquel entonces se empezó a desarrollar un software que analizara todas las partidas online que iban a ser la base de uno de los juegos estrella de la primera Xbox. La idea era que se grabaran los lugares donde sucedía cada muerte, la cantidad de veces que los jugadores recogían un arma concreta y dónde lo hacían, las zonas más concurridas y las más desiertas… vamos, lo que tradicionalmente han hecho los betatesters.
El software ideado para Halo 2, Halo 3 y sucesivos tiene más de 10 años de desarrollo a sus espaldas y es uno de los valores más importantes de Microsoft de cara al multijugador online. Su estado actual se puede ver, en parte, dentro de la función Drivatar de Forza 5, pero la nube es su nuevo hogar y con Halo 5 veremos un nuevo salto de calidad.
Aún es pronto para avanzar detalles concretos sobre el uso de la nube de Xbox One en Halo 5 o cómo influirá en la nueva versión de Forge, la herramienta para crear niveles que incorporará el juego. Pero con ejemplos como el de Forza 5 o, incluso, Project Spark, podemos hacernos una idea de lo que ya funciona a nivel interno en Microsoft. El E3 2014 está muy cerca y es el lugar que esperamos para conocer lo que nos han preparado. Así que debemos tener un poco más de paciencia antes de pensar en el éxito que le espera a la nube de Xbox One. A esta tecnología y a Kinect, que Halo 5 también utilizará, junto a Smartglass, como era de esperar. ¿Cómo te gustaría que fuera su uso en este juego?
Con que llegue a 1080p me da igual que utilice más o menos la nube
Yo espero que este Halo sorprenda de verdad, y que innove en muchos apartados, el online del 4 no le llego a la suela del zapato al 3…. (mi opinión) 🙂