La tan debatida «guerra de consolas» entre Xbox y PlayStation podría estar llegando a su fin, o al menos eso es lo que sugieren los últimos movimientos de la industria. El lanzamiento de Helldivers 2 en Xbox se ha convertido en el ejemplo perfecto de una nueva fase en el mercado de los videojuegos, donde la verdadera batalla ya no es por las exclusivas de hardware, sino por la lealtad de los jugadores en un entorno dominado por los juegos como servicio.
Según un artículo de opinión de Christopher y otros expertos, la conversación sobre «Xbox vs PlayStation» está «muerta». Argumentan que el enfoque ha cambiado por completo. La competencia ahora se centra en títulos de servicio en vivo como Fortnite o Roblox, que luchan por captar la atención de los jugadores a lo largo del tiempo. En este nuevo panorama, la posibilidad de que un juego como Helldivers 2, un éxito rotundo, llegue a más plataformas es una señal de que el modelo de negocio está evolucionando.
Sin embargo, no todos están convencidos. Algunos analistas, como dveio, señalan que los movimientos de Microsoft de lanzar sus juegos en otras plataformas podrían no ser un cambio genuino de mentalidad, sino una respuesta a la realidad del mercado. Mencionan que la PS5 ha superado a Xbox en ventas a nivel global en una proporción de 6 a 1 y que los ingresos de Microsoft podrían estar decayendo. Según esta perspectiva, llevar títulos a otras consolas sería una estrategia forzada para recuperar ventas perdidas, más que un acto de «llevar juegos a todo el mundo».
Otro punto de debate es si esta tendencia se limitará a los juegos multijugador y de servicio. Mientras algunos creen que los títulos para un solo jugador seguirán siendo exclusivos para proteger las ventas de hardware, otros sostienen que el éxito financiero de los juegos multiplataforma terminará por convencer a los desarrolladores de que la mejor estrategia es lanzar sus juegos en todas las consolas para maximizar los beneficios.
El caso de Helldivers 2 en Xbox respalda esta última teoría. El artículo de opinión destaca que el juego vendió casi 1 millón de copias en Xbox en solo seis días, generando más de 40 millones de dólares en ingresos. Esta cifra supera incluso su lanzamiento en PS5 en el mismo período, lo que demuestra el enorme potencial de ganancias que tiene un lanzamiento multiplataforma en el mercado actual.