Érase una vez una obra de Teatro que se convirtió en reunión de Zoom durante la pandemia. Sherlock Holmes: The Case of the Hung Parliament podría reducirse a esto, pero no sería justo. Pues se trata de un juego que tiene detrás algunos elementos curiosos. Además de un personaje atemporal e incombustible, que se deja ver entre nuestras pesquisas como novatos.
Que saliera en 2021 no impide que le prestemos atención a Sherlock Holmes: The Case of the Hung Parliament este año. Porque ha salido en Meta Quest 2 este verano. Llega con la sensación de que nos mete en un escape room con varias salas. Algo de moda, pero que con la realidad virtual promete ser todo un fenómeno dentro de no muchos meses. En cuanto Quest 3 y Vision Pro se pongan las pilas.
Lo que nos plantea el juego es una situación al más alto nivel. Donde un miembro del parlamento a aparecido muerto y empiezan a salir sospechosos de asesinato. Pero, ¿dónde está Sherlock? Pues no muy lejos, pero dedicado a otros asuntos que nos ponen al frente de la investigación.
A nivel artístico, los actores no llegan a dar un nivel cinematográfico de primer nivel. Tampoco son los típicos miembros de un escape room de barrio que se disfrazan para la ocasión. Resultan convincentes y el resto de las salas también, pero sin grandes pretensiones. Es una especie de experimento que se marcaron en el museo de cera de Londres allá por 2016, para luego pasarlo a Zoom y que ahora salta a Quest 2. En el camino, las cosas han mejorado, pero no de manera espectacular.
El mayor inconveniente viene de la mano del inglés, porque está todo en su lengua original y esto puede sacar a mucha gente de la experiencia en pocos segundos. Eso sí, como curso de idiomas no está nada mal, ¿verdad? Superado este escollo, tenemos que escuchar a cada personaje, leer textos, husmear por las salas y ordenar las pruebas en una pared.
Un punto a favor es que se mantienen las opciones de juego cooperativo, con lo que podemos compartir pistas y conclusiones con otros. De esta forma, la experiencia cambia mucho y gana enteros. Es como enfrentarse a un escape room en solitario o hacerlo con otros tres amigos. Si no pasan de ti, puede ser maravilloso.
El sistema de interrogatorios se basa en conversaciones y eliminación de pistas. Con el resultado que se añade a nuestra agenda. Una vez que nos veamos en condiciones podemos recurrir a Sherlock. Él sabe quién ha cometido el crimen, pero nos dará coba para soltar todo lo que hemos trabajado. Si coincidimos, premio. Si no acertamos, nos dirá que deberíamos estar en otro sitio, pues ser detective no es cosa fácil, que diría un enterado.
La media hora que se puede dedicar al caso sirve para que echemos alguna partida rápida e intensa. Es una carrera contra reloj en la que el Primer Ministro Británico nos pondrá las pilas para que no nos eternicemos. Aunque con opciones para dilatar todo y que no nos agobie en exceso. Pero, bueno, son las Quest 2 lo que tenemos en la cabeza. Tampoco es cuestión de estar horas con ellas, por eso del cansancio visual.
¿Merece la pena Sherlock Holmes: The Case of the Hung Parliament? Para quien entienda el inglés sin problemas es una experiencia recomendable. Nos hemos enfrentado a escape rooms inferiores y muy inferiores en nuestra carrera por superar las primeras 100 en el mundo real. Pero el idioma es un impedimento para quien no controle lo suficiente.
Te gustará si:
Te gustan los escape room
Sabes inglés como para hacerte un escape room
Te crees mejor que Sherlock o Watson o, incluso, mejor que Lestrade
No lo toques si:
Te saltaste las clases de inglés
Ché Sáez 
Binary Domain 