Trasladarse al papel de una mansión encantada no es algo que uno espere en un roguelike de construcción de mazos, pero Deck of Haunts lo hace posible. Este título que tiene vibras de Dungeon Keeper con cartas me ha atrapado con su propuesta original y su atmósfera inquietante, aunque también me ha dejado con sensaciones encontradas.
Una propuesta original y atractiva
Desde el primer momento, Deck of Haunts destaca por su enfoque único: en lugar de ser el héroe que explora una casa embrujada, aquí eres la propia mansión, una entidad maligna que busca proteger su «Corazón» durante 28 noches. Durante el día, expandes y personalizas tu hogar con habitaciones que ofrecen ventajas estratégicas. Por la noche, utilizas cartas para aterrorizar y eliminar a los intrusos que osan perturbar tu descanso.
La mecánica de juego combina elementos de construcción de mazos y defensa estratégica. Cada carta representa una manifestación de horror: apariciones, sonidos escalofriantes, deformaciones arquitectónicas y presencias invisibles. Estas cartas se juegan en habitaciones específicas, lo que añade una capa táctica al juego.
Fortalezas que brillan en la oscuridad
Uno de los aspectos más destacados es la sinergia entre las cartas y las habitaciones. Al colocar habitaciones que potencian ciertos efectos y utilizar cartas que se benefician de esas mejoras, se pueden crear combinaciones devastadoras. Además, la progresión del juego permite desbloquear nuevas cartas y habitaciones, lo que mantiene el interés a lo largo de varias partidas.
La ambientación también merece una mención especial. La estética art déco de los años 20, combinada con una atmósfera opresiva y detalles macabros, crea una experiencia inmersiva que recuerda a las películas de terror clásicas.
Sombras en los pasillos
Sin embargo, no todo es perfecto en Deck of Haunts. La progresión entre partidas, aunque presente, puede resultar limitada. Después de varias victorias, la motivación para seguir jugando disminuye, ya que los desbloqueos no siempre ofrecen cambios significativos en la jugabilidad.
Además, la interfaz presenta algunos inconvenientes. En ocasiones, las cartas pueden ocultar elementos importantes en la pantalla, lo que dificulta la toma de decisiones. La falta de soporte para controladores también limita la accesibilidad, especialmente para aquellos que prefieren jugar en dispositivos como la Steam Deck.
Conclusión: una joya con imperfecciones
Deck of Haunts es una propuesta fresca y original en el género de los roguelikes de construcción de mazos. Su enfoque único, combinando estrategia, horror y humor negro, ofrece una experiencia memorable. Aunque presenta algunas limitaciones en la progresión y la interfaz, sus fortalezas superan con creces sus debilidades.
Si buscas una experiencia diferente, donde el terror y la estrategia se entrelacen de manera innovadora, Deck of Haunts merece un lugar en tu biblioteca de juegos.
He jugado a Deck of Haunts en una Steam Deck gracias al código de prensa enviado por Pirate PR a través de PressEngine.