Ya hemos dado nuestros primeros pasos en Wasteland 2 para Xbox One y, salvo por la dificultad para trasladar la interfaz desde el PC, las cosas pintan muy bien. El juego tiene esa ambientación que nos cautivó hace ya décadas y el humor marca de la casa. Como precursor de los rpg post-apocalípticos y con gente de la talla de Brian Fargo por medio, no esperábamos menos de esta actualización de la saga en nuestras consolas.
El principio de la historia nos lleva a un futuro donde sobrevivir es muy duro. El juego nos lleva 25 años después de la primera parte, que nació en los PC, con una relación estrecha… con Fallout. El lugar elegido para la aventura es lo que queda del sudeste norteamericano. El papel de protagonista recae sobre un ranger, al estilo Chuck Norris, pero más desalineado. Como vemos en el vídeo, acabar con las amenazas, buscar recursos y evolucionar requiere de tácticas y estrategia, no solo hay que pulsar el botón de disparo. Eso sí, con más de 150 armas y opciones de personalización, tampoco es plan de dejarlas por ahí tiradas.
Como dato curioso, esta edición se ha realizado con el motor Unity que se ha popularizado en los proyectos indie, pero también en algunos muy ambiciosos. En la versión que tenemos para Xbox One, se han añadido 8.000 líneas de código y algunos diálogos sin desperdicio. Con lo que si ya lo jugaste en su edición normal y te quedaste con ganas de volver a por más, quizá sea tu oportunidad.
Aunque aquí vemos cómo no hay que hacer las cosas cuando nos encontramos un peligro, estos primeros pasos en Wasteland 2 son son solo una muestra de lo que prometen ser 80 horas de acción e historias para recordar. Porque en esta saga hay que estar atentos a lo que se cuenta. 39,99€ tienen la culpa, que es su precio de lanzamiento.