[ACTUALIZADO] Quantum Break es un juego acerca de héroes (Jack Joyce), villanos (Monarch Solutions) y elecciones. Amenazas que juegan con acabar con todos nosotros, con el fin de los tiempos. Pero aún le queda bastante para llegar a nuestras Xbox One. Lo hará en exclusiva para la consola de Microsoft, pero en 2015.
De momento, vemos en el vídeo que los poderes una vez en juego son tan espectaculares como lo adelantado el año pasado en el E3 2013. Se podrá parar el tiempo y jugar con él. Algo que nos recuerda un poco a cierto juego de la primera Xbox… que aprovechaba el disco duro de la consola para algo más que guardar partidas. ¿Recuerdas aquel gato tan apañado que vino de Japón y que pocos entendieron?
El control en Quantum Break parece una evolución del de Alan Wake. Vemos al protagonista con un buen control de la lucha cuerpo a cuerpo, pero también con armas de fuego. Hay enemigos blindados, que seguramente nos den buenos ratos hasta acabar con ellos. Como en el anterior juego de Remedy, esperamos que cada enfrentamiento sea un reto.
En cuanto al nivel gráfico, las explosiones tienen tan buena pinta que es mejor no hacernos demasiadas ilusiones. Así, no cabe sitio para la decepción. Pero siendo Remedy quien está detrás, seguro que visualmente no tiene desperdicio alguno. Si en Xbox 360 consiguieron recrear la ciudad y el lago, la noche y las visiones, junto a todo lo que casi nos vuelve locos… Quantum Break puede marcar otro antes y después para la forma de hacer un juego que parezca una película.
La buena noticia es que el juego no parece una sucesión de vídeos en los que elegir opciones para continuar. Hay acción, enemigos que se las traen, situaciones que parecen imposibles y los guionistas, con Sam Lake a la cabeza, prometen una historia de esas que no paran de dar vueltas hasta que consigues dormir. Lo queremos ya… pero hasta la Gamescom de agosto parece que no tendremos algo realmente sólido y a disposición de los críticos/jugadores. ¡Qué lejos vemos 2015!