Los ingresos globales de Microsoft en 2022 por juegos descendieron un 13% interanual, debido a un descenso del 13% en los ingresos por hardware de Xbox y del 12% en los ingresos por contenidos y servicios de Xbox. Microsoft aduce que el descenso de los ingresos por contenidos de juegos se debe a la falta de contenidos first-party y al descenso de las ventas a terceros. Es justo, ya que en el segundo trimestre anterior se lanzó Halo Infinite, mientras que en este segundo trimestre el gran juego de Microsoft ha sido… Pentiment. Un gran juego, pero no exactamente en la misma liga que Master Chief.
El descenso de las ventas de hardware es menos fácil de explicar. El año pasado, la oferta de las Xbox Series X y S seguía siendo limitada, mientras que este año era relativamente abundante. De hecho, la Xbox Series S fue la única consola de la actual generación que ofreció descuentos significativos durante la gran temporada de compras navideñas. Esos descuentos no consiguieron impulsar a la Xbox Series S a una victoria navideña -la Nintendo Switch y la PlayStation 5 aún la superaron ampliamente- ni siquiera por encima de las ventas de la Xbox Series del año pasado.
El lado positivo de todo esto es que el servicio Game Pass de Microsoft en 2022 sigue creciendo, aunque la compañía no proporcionó cifras concretas de suscriptores. Microsoft ha dado un fuerte impulso a Game Pass en los últimos años y, aunque el servicio sigue creciendo, no alcanzó los objetivos en 2022. El jefe de Xbox, Phil Spencer, también ha admitido que Game Pass probablemente nunca representará más del 10 o 15 por ciento de su negocio de juegos. Como demuestran los resultados de hoy, si el hardware de Xbox y las ventas de juegos tradicionales bajan, Game Pass no es suficiente para enderezar el rumbo. En este sentido, durante la conferencia de resultados de Microsoft, la directora financiera Amy Hood dijo que el contenido de Xbox probablemente se reducirá en «un solo dígito» de nuevo el próximo trimestre, ya que el crecimiento de Game Pass no puede compensar la disminución de los ingresos por servicios en directo de títulos propios y de terceros.
La semana pasada, Microsoft anunció la supresión de 10.000 puestos de trabajo, y la división Xbox sufrió los efectos. En particular, se dice que el desarrollador de Halo 343 Industries ha sido «duramente golpeado». Por supuesto, Microsoft también está intentando comprar Activision Blizzard por 69.000 millones de dólares, aunque la operación se enfrenta a la oposición de los organismos reguladores.
Ché Sáez 