Parece que ARC Raiders lo está petando, pero hablemos de los habituales. El lanzamiento de Call of Duty: Black Ops 7 generó expectación en toda Europa. La primera semana logró situarse en lo más alto de las listas de ventas, aunque con cifras inferiores a las de su competidor directo, Battlefield 6. Según los datos de GSD Sales Data publicados por The Game Business, el estreno fue un éxito relativo, pero pronto se evidenció un retroceso. En la segunda semana, comprendida entre el 17 y el 23 de noviembre, el título descendió al segundo lugar, superado por EA Sports FC 26 tanto en ingresos como en unidades vendidas. ¿CoD pierde fuelle o es solo un ajuste temporal?
El fenómeno no sorprende si analizamos el contexto. La franquicia Call of Duty mantiene un público fiel, pero la saturación del mercado y la competencia creciente afectan su rendimiento. La caída del liderazgo refleja un cambio en las preferencias de los jugadores europeos, que buscan experiencias más variadas. En este caso, el simulador deportivo de Electronic Arts aprovechó la temporada de fútbol y la proximidad del Black Friday para imponerse.
Los números hablan por sí solos. CoD pierde fuelle frente a un rival que capitaliza la pasión por el deporte rey. La diferencia de un 63% respecto a Battlefield 6 en la semana de estreno confirma que la saga bélica ya no domina como antes. La presencia de títulos como Anno 117: Pax Romana o Pokémon Legends Z-A en el top diez demuestra que el público diversifica sus elecciones.
El impacto de las promociones también resulta clave. Durante el Black Friday, juegos que habían desaparecido de las listas reaparecieron con fuerza. Marvel’s Spider-Man 2 y It Takes Two regresaron gracias a descuentos agresivos. Este factor evidencia cómo las campañas comerciales influyen en el comportamiento de compra, incluso más que las novedades.
La segunda semana de Black Ops 7 muestra un panorama competitivo. Battlefield 6 se mantiene en el tercer puesto, mientras que clásicos como Grand Theft Auto V y Red Dead Redemption 2 siguen atrayendo a nuevos jugadores. La permanencia de estos títulos en las listas confirma la vigencia de propuestas con mundos abiertos y narrativas sólidas.
El análisis técnico revela que la caída de Black Ops 7 responde a varios elementos. Por un lado, la repetición de mecánicas limita la innovación. Por otro, la comunidad demanda actualizaciones constantes. La hoja de ruta de la primera temporada incluye armas nuevas, mapas adicionales y contenido para el modo zombis, pero la reacción inicial indica que no basta con añadir extras. El consumidor europeo exige experiencias frescas y diferenciadas.
La situación abre un debate sobre el futuro de la saga. La marca Call of Duty sigue siendo poderosa, pero necesita reinventarse para recuperar terreno. La competencia no solo proviene de shooters tradicionales, sino también de géneros alternativos que capturan la atención. La estrategia de Activision deberá adaptarse a un mercado en el que las promociones, la innovación y la fidelización pesan más que el nombre histórico.
En conclusión, CoD pierde fuelle en Europa con Black Ops 7. El segundo puesto refleja un cambio de tendencia y plantea interrogantes sobre la capacidad de la franquicia para mantener su hegemonía. El mercado europeo se muestra dinámico, con consumidores que valoran tanto las novedades como las ofertas. El futuro dependerá de la respuesta de Activision y de la capacidad de la saga para reinventarse en un entorno cada vez más competitivo.
| Nombre oficial | Call of Duty: Black Ops 7 |
| Desarrollador | Activision |
| Fecha de lanzamiento | Noviembre 2025 |
| Plataformas | PlayStation 5, Xbox Series X|S, PC |
| Modos | Campaña, Multijugador, Zombis |
| Contenido adicional | Season 1 Roadmap: armas, mapas, zombis |


