Barotrauma ha estado en acceso anticipado desde junio de 2019 hasta este mismo mes, septiembre de 2023, en el que ha llegado por fin a las mejores tiendas digitales de PC y consolas. Eso son cuatro años recogiendo los comentarios de los jugadores y puliendo un juego que tiene millones de pequeños detalles. Nadie puede echar en cara a los finlandeses FakeFish que no hayan puesto todo el empeño posible en su obra. Y nadie, absolutamente nadie, puede decir que Barotrauma sea un mal juego. De hecho es un juego que se sale de lo normal. Pero en todos los malditos sentidos. Sí, es un gran juego. Sí, tiene un gran pero: su propuesta es tan extraña que no se puede recomendar a todo el mundo.
Un mundo de etiquetas
Barotrauma es un simulador de submarino, pero no de un submarino cualquiera sino de uno que surca las profundidades oceánicas de Europa. No hablo del viejo continente sino de Europa, la luna de Júpiter. Por lo tanto es un juego de ciencia ficción. Además debemos luchar con los seres que habitan el segundo satélite de Júpiter contando con el escaso arsenal de que dispone nuestra nave sumergible. Vamos, que también podríamos decir que es un survival horror de manual.
Podemos elegir entre varios tipos de personaje, capitán, ingeniero, mecánico, auxiliar, médico y oficial de seguridad. Todos ellos pueden mejorar sus capacidades según vayamos jugando por lo que sin duda estamos ante un juego de rol. Escogemos un oficio y el resto de personajes pueden ser controlados por la inteligencia artificial si jugamos en solitario, aunque esto es poco aconsejable ya que Barotrauma está pensado para ser jugado por seis personas, encargándose cada uno de ellos de un oficio dentro del submarino. Vamos, que podemos añadir juego cooperativo online a la mezcla.
Por si esto fuera poco lo primero que llama la atención cuando tomamos el control de nuestro avatar es el movimiento tipo muñeco de paja que se gasta. Nos movemos con las teclas y el personaje siempre mira hacia el ratón, aunque camine hacia el lado contrario. Como hagamos algún movimiento brusco es fácil que no se desplome al suelo sin más y usar las escaleras, abrir puertas, agarrar objetos… puede ser una experiencia complicada. Si añadimos que cada aventura se genera de forma aleatoria, la cosa queda en: Simulador de supervivencia submarina cooperativo persistente sci-fi walking simulator RPG procedural. Menos mal que no hay que poner la etiqueta en la caja del juego.
Difícil, complicado y además muy difícil
Ya sé lo que estáis pensando: son demasiados juegos en uno, eso no puede funcionar bien. Un estudio gigantesco como Bethesda en título del calibre de Starfield ha querido meter tantos juegos diferentes en uno y les ha funcionado bien, aunque no todos los aspectos sean perfectos. Entonces, ¿qué puede hacer un equipo de veinte personas con un título? Pues más o menos lo mismo, salvando las diferencias de tamaño.
Todas esas ideas tan diversas que te lanza Barotrauma en sus misiones forman un todo que engancha. Y menos mal, porque es un juego muy cabrón que te va a hacer morir de forma estúpida en muchas ocasiones. El caso es que consigue que quieras volver a intentarlo una y otra vez. Aquí hacemos de todo, reparar el submarino, combatir montruos lovecraftianos, curar a tus compañeros, explorar cuevas, descubrir al traidor de la tripulación… y todo es difícil porque los señores de FakeFish han decidido que la jugabilidad sea hostil con el usuario.
Ojo, no hablo de que los controles no respondan bien. El control de Barotrauma está refinadísimo y todo va como tiene que ir. Me refiero a que todas las acciones son complicadas. No vale con acercarse a una puerta para que se abra, hay que pulsar un botón para poder atravesarla y otro para que se cierre tras de ti. Si tenemos que reparar un aparato que se encuentra en una estancia inundada no vale con zambullirnos y hacer click sobre el desperfecto. Debemos: abrir la taquilla que tiene el traje de submarinista, ponérnoslo, buscar la bombona de oxígeno y colocarla en el traje, bajar las escaleras hasta el fondo, colocar un destornillador en la mano izquierda, una llave inglesa en la mano derecha y actuar sobre la avería. Todo esto, no lo olvidemos, controlando un personaje que parece un muñeco de trapo. A veces todo esto a contrarreloj y sabiendo que si nos saltamos un paso, o si no andamos finos y se cae el destornillador al suelo, todo se puede ir al garete y tendremos que repetir la misión o parte de ella.
¿Merece la pena jugar Barotrauma?
Sí, sin dudarlo. Está rebosante de trabajo y preocupación por el detalle en cada rincón de la partida. No es un programa que busque el agrado inmediato y constante. Cuesta entrar en su mundo extraño y requiere de un pequeño esfuerzo en los primeros minutos de partida. Porque todo en Barotrauma está pensado para hacernos desistir, para tirar la toalla e irnos a jugar una partida con Kirby, pero si le damos una oportunidad quedaremos enganchados en su mundo oscuro y feo. Es un gran juego que no puede ser apreciado por cualquiera, no se le puede recomendar a tu primo el que sólo juega al FIFA y al Call of Duty porque va a abandonar en menos de un minuto.
Te gustará Barotrauma si:
- Buscas algo oscuro y difícil que te ponga la zancadilla constantemente pero a la vez te haga querer levantarte y continuar para ver qué más puede ofrecerte.
- Eres amante de los simuladores de vida pormenorizados que te obliguen a estar atento al efectuar cada pequeña acción.
No te gustará si:
- Lo que quieres es un juego lleno de colorines con jugabilidad relajante. Eso lo encontrarás en City Limits.
- Rendirte es tu nombre y poca paciencia tus apellidos.
Hemos sufrido y gozado de Barotrauma en una Steam Deck gracias al código de análisis suministrado por FakeFish Games a traves de Daedalic.
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