Ya habíamos visto que el nuevo Call of Duty, Advanced Warfare, iba a ser diferente a los cuatro o cinco anteriores. Bastante si nos centramos en la tecnología que lo moverá, al menos en Xbox One. Aunque, para ser el primero hecho para la nueva generación, quizá no debamos pensar en algo realmente espectacular respecto a CoD: Ghosts. Es el primero de SledgeHammer Games, así que dejémosles un poco de margen a las nuevas estrellas, como Jonathan Irons (interpretado por Kevin Spacey). Esto es solo el principio:
En Call of Duty Advanced Warfare nos vamos a un futuro en el que la potencia armamentística más fuerte es la empresa con más dinero para invertir en armas. Algo que, poco a poco, nos empieza a sonar tras las burbujas de Academi (antes conocidos como Xe Services LLC, Blackwater USA y Blackwater Worldwide) o los mercenarios rusos que se han quedado Crimea.
Una buena noticia es que el vídeo de arriba está capturado directamente de la versión para Xbox One de Call of Duty Advanced Warfare. También, que Activision y Microsoft mantienen su colaboración para llevar la saga CoD a lo más alto de los eSports, también en el futuro. Además, contamos con que habrá contenidos exclusivos para la nueva generación de Xbox con esta nueva entrega, así como una sorpresa durante el E3 2014 que se celebra en junio. Esperemos que no solo sea un vídeo en juego, como ha sucedido los últimos años.
¿Y qué añade CoD Advanced Warfare, aparte de un nombre bastante explicativo? Pues, desde supersoldados con exoesqueletos, hasta motos voladoras. Sí, nos vamos a un futuro en el que las empresas privadas se han puesto moradas con el dinero de los contribuyentes, en este caso, los de Estados Unidos. Aunque, de momento, no está claro qué tipo de conflictos nos vamos a cargar a la espalda o si vamos a ir de mercenarios, regulares, buenos o malos (para quien la pille y le haga gracia, la broma es gratis).
Bueno, dicho esto, parece que la relación de Activision con Hollywood va por buen camino, aunque de momento no tengamos película de Call of Duty. Incluso tienen a Kevin Spacey haciendo de señor de la guerra desalmado, encorbatado y todo lo que va a juego en estos casos. Un derroche de medios, que nos recuerda un poco a Titanfall, por eso de saltar mucho, subir por las paredes y meterse en algo así como tanques verticales que lanzan misiles. ¿Tenemos otro éxito seguro para 2014 o la competencia, sin modo historia, podrá con Call of Duty?
